La Seguridad Social y la economía médica en Chile
Abstract
Traducción de un artículo del World Medical Journal, vol. 9 N°4, del mes de julio 1962, que informa sobre la seguridad social y el desarrollo de la medicina social en Chile.
Describe las acciones fundamentales en salud y los regímenes básicos de Seguridad Social y la población cubierta; el financiamiento, gastos y prestaciones de la medicina social; las instituciones de seguros sociales y la acción de los médicos.
Explica que el desarrollo de la medicina social en Chile se ha hecho a base de un tipo parcial en el cual ciertos sectores están más protegidos que otros en razón de su afiliación a un régimen de seguros sociales. Los objetivos de la Medicina Social pueden resumirse en tres puntos: Proporcionar atención médica independiente de la capacidad económica del solicitante; dar atención médica a grandes sectores de la comunidad; y proporcionar atención médica completa en forma preventiva, curativa, y de rehabilitación.
La medicina social en Chile concede tres tipos de prestaciones: a) Servicios de atención médica preventiva y curativa materno-infantil y del adulto y atención dental. b) En especies: medicamentos, alimentos y prótesis. c) En dinero: subsidios por enfermedad, maternidad y lactancia. Las dos primeras prestaciones son dadas en mayor o menor grado a toda la comunidad y la tercera prestación sólo a aquéllos que pertenezcan a un tipo de seguro social.
El Servicio Nacional de Salud fue el resultado de la fusión de los servicios sanitarios, de beneficencia y de asistencia médica de los obreros, y en su primera etapa tuvo dificultades de integración y dificultades presupuestarias por el no cumplimiento de la totalidad de las subvenciones fiscales. En diciembre de 1957, 5 años después de su formación, la Misión Klein & Saks declaraba: "En lo referente a la ampliación de sus actividades para afrontar las necesidades de salubridad de la población, el Servicio, a pesar de sus dificultades financieras, ha tenido un éxito considerable". Se reconoció que, en principio, el Servicio carecía de suficiente personal preparado y experimentado en el campo de la administración.
Informa que la profesión médica ha recibido beneficios del sistema de seguridad social, pero también ha sido perjudicada, especialmente en aspectos de orden profesional, económico y gremial.
Finalmente, señala que las soluciones para resolver las dificultades de la medicina social en Chile incluyen: la protección de la salud de toda la población bajo una acción planificada basada en un financiamiento estatal adecuado; la reducción de los objetivos del plan de atención médica a un límite compatible con el nivel de desarrollo económico-social del país; la racionalización del uso de los recursos médicos para mejorar la atención mediante la aplicación del bono-moderador, para evitar consultas inútiles y un trabajo excesivo, y la organización de consultorios periféricos con equipos de especialistas para servir distritos no superiores a 30,000 habitantes y evitar aglomeraciones en los grandes consultorios y hospitales.
Asimismo, indica que para satisfacer las justas aspiraciones económicas de los médicos debería desarrollarse el sistema de "libre elección" y pago por cada consulta o "acto médico", implantarse el método de remuneración per cápita dentro de las instituciones de medicina social y aumentarse la jornada funcionaria de 6 a ocho horas diarias.
Collections
- 1962 [31]