dc.description.abstract | Conclusión del artículo iniciado en el número 3 de la revista Informaciones Sociales, de setiembre de 1937 y continuado en el Número 4 de 1937. En esta parte se analiza la economía de la producción algodonera en Ica.
El cultivo del algodón Tangüis en el valle de Ica ocupaba aproximadamente el 70% de la superficie de cultivo y en los valles de El Ingenio, Nasca y Palpa más del 80%. Se analizó y determinó el valor económico de cada uno de sus factores: Gastos, Renta de la tierra, Contribuciones, Interés y el Beneficio de la Producción.
Se revisaron los gastos por costo de semillas, abonos, animales de tiro, salarios y los diversos. En éstos últimos se incluyen los extraordinarios o imprevistos. Los gastos se semilla se valorizó en 20 soles y los gastos de abono se calcularon en 270 soles por fanegada. En el caso de los animales de tiro, para obtener el coste de labranza y preparación de la tierra por medio de yuntas debió tenerse en cuenta los gastos de sostenimiento y de servicio de los capitales que éstas ocasionan, el número de días que trabajan, la extensión labrada diariamente y la cuota de amortización del arado, teniendo en cuenta estos elementos se calculó el coste por fanegada en 48.88 soles. Se incluye un cuadro con el detalle de los gastos por salario de los trabajadores, con un total de 341.30 soles por fanegada.
La renta de la tierra se representó por su valor locativo, considerando su rendimiento como capital no mayor del 6% y su valor venal estimado en los valles de Ica entre 2,000 soles y 3,000 soles por fanegada.
Las contribuciones se representaron por las siguientes cargas: abonos por predios rústicos, impuesto a la renta del capital movible y los derechos del agua. El factor interés comprendió el redituado por el capital de explotación, o sea el invertido en gastos de cultivo, el pago de contribuciones y el de la renta de la tierra.
El beneficio de la producción algodonera en la provincia de Ica se calculó, en el último año, de 377.66 soles por fanegada. Conocida la economía de la producción algodonera en la provincia, se calculó los porcentajes de aportes y beneficios que correspondieron a las haciendas y al compañero. En resumen, los aportes de la negociación se calcularon en 461.04 soles o 44,37% y del compañero en 501.30 soles o 55,63%. Los beneficios por fanegada se calcularon en 334.59 soles o 88,6% para la negociación y 43.07 soles o 11,4% para el compañero.
En el caso de la producción en la explotación de la tierra mediante arrendatarios se examinó principalmente el valor locativo, el beneficio de la producción y los casos en que la locación implicó el contrato de yanaconazgo. El contrato era de arrendamiento cuando el locatario no está sujeto a ninguna limitación sobre el uso y disfrute de la tierra y de yanaconazgo cuando pagaba la merced conductiva en especie determinada y no tenía el libre uso de la tierra ni la libre disposición de los productos. En el yanaconazgo los arrendatarios asumían generalmente obligaciones que implicaban dependencia y subordinación al locador.
Concluye que este informe ha tenido el objetivo de estudiar las modalidades que imperaban en los valles de Ica para la explotación indirecta de la tierra. En esta parte sólo se abordó el aspecto económico. El autor reserva para otra oportunidad estudiar los aspectos jurídico y social de estas formas de explotación. | es_PE |